jueves, 7 de marzo de 2013

LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA Y SU TRANSFORMACIÓN




Las instituciones de educación universitaria vislumbran hoy una necesaria transformación  que genere cambios orientados a lo que debe ser una verdadera  universidad,  su relación con la sociedad y con la capacidad productiva que permita contribuir a la solución de los problemas del pueblo  y de esta manera entrelazar la necesaria relación pueblo-universidad, insertada en las nuevas concepciones de la gerencia del conocimiento y del desarrollo organizacional en las instituciones universitarias.  Importante la significación de renovar las formas de aprehender la cuestión social, desde una postura epistémica cualitativa, intersubjetiva y dialógica.  
Uno de los principales medios para afrontar el siglo XXI consiste en garantizar los beneficios de la educación a todos, asegurando un sistema  de educación universitario equitativo, eficiente y eficaz.
La transformación universitaria tiene como uno de sus objetivos principales desarrollar y profundizar la democracia participativa, integrar y lograr  la participación de todos los sectores que hacen vida en las universidades, participar activamente en la toma de decisiones, de vital importancia la integración. Desarrollar la democracia participativa en las instituciones  universitarias del pensamiento de  todos los involucrados, respetando y teniendo en cuenta los siguientes aspectos:
ü  La Relación pueblo-universidad
ü  La inclusión social.
ü  La autonomía universitaria.
ü  La democracia participativa
ü  El estudiante y el profesorado universitario.
ü  La calidad y la pertinencia de la educación universitaria,
ü  El diseño curricular y los programas de formación.
ü  El Diseño institucional y sistema universitario.
ü  La investigación y la transferencia tecnológica.
ü  El gobierno universitario
ü   La administración del presupuesto universitario.
ü  La evaluación del sistema universitario.
ü  La universidad en el contexto internacional.
El verdadero impacto de la educación está en definir y elaborar propuestas para continuar con la transformación, en este sentido, a la Universidad le corresponde la reorganización y flexibilización de sus estructuras académicas, dado que es el centro de la actividad intelectual por excelencia. Estas exigencias de las transformaciones en las formas de organizar y operar la educación en general y la educación universitaria en particular, es la que marca los desafíos a los que se enfrentan las universidades en la actualidad.
 Es un reto para nuestra  universidad y en especial para nosotros los docentes,  encarar esta realidad en un entorno envuelto en el amor, despertando el placer del estudiante por la labor de aprendizaje y de forma simultánea el gusto por su vocación al enfrentarse con su realidad.  En la voz de Maturana (2002), al hablar de los valores de la honestidad como objetivo principal de la educación, plantea que los valores sociales son actos voluntarios, no depende de leyes, ni de ningún tipo de imposición sino de un acto intencional; es decir, los valores se viven y se comparten, son relacionales y convivales, no se enseñan, hay que vivirlos y testimoniarlos.
La Universidad desde este escenario, aun mas, necesita renovar sus teorías, sus prácticas sociales, demanda una nueva episteme, requiere de enfoques epistemológicos abiertos, racionales, críticos, reflexivos, autocríticos, relacionales, dialógicos, comprensivos, convivales y aptos para lograr la reconstrucción organizacional de todos sus actores sociales, partiendo de la complejidad de nuestros pensamientos, de nuestras estructuras mentales, renovarlas y ubicarlas en el contexto de la realidad social contemporánea, solo así nos encaminamos hacia una verdadera y autentica transformación universitaria.

Danyra Pimentel

No hay comentarios:

Publicar un comentario